Esta intervención es un homenaje a todas las victimas de la opresión por la fuerzas armadas quienes tuvieron que callar episodios de terror por miedo, verguenza, tristeza.
La violencia sexual ha sido usada como un medio para humillar y someter a las personas, donde la mujer ha sido el género más vulnerable en estas agresiones. Durante el conflicto interno armado en el Perú (entre el estado y Sendero Luminoso), el CVR encontró más de 500 casos de violencia sexual donde la mayoría fue cometida por los miembros de las fuerzas armadas, sin embargo 15 años después figuran más de 4mil víctima de violencia sexual.

Se debe comentar que en muchas culturas el cuerpo de la mujer tiene un valor simbólico, ocasionando que estas agresiones repercutan como un ataque en la identidad de la comunidad, de este modo la estrategia de guerra subordina a los pueblos.